viernes, 25 de julio de 2014

"Yo soy la hija del frío."

Somos los hijos del hielo, fríos, egoístas y mezquinos.
Somos miembros de un clan destruido, los últimos de nuestra estirpe.
Somos guerreros natos, fuertes y raudos como las rocas, veloces como el viento y letales como el propio veneno. 
Somos los encargados de vuestro último aliento. Valquirias que os llaman a la batalla. Sirenas que os atraen hacia vuestra propia muerte.



O quizás sólo seamos niños con corazones helados y cuerpos muertos.

jueves, 17 de julio de 2014

"La joven del agua."

Las mejores guerras suceden en una bañera, bajo la mirada atenta de los incrédulos participantes. Batallas que duran horas y que acaban con un tratado de paz y una retirada de tropas, mientras los dos soldados de bandos enemigos borran las huellas de esa lucha por la supervivencia, por el territorio. 

Pero yo siempre vuelvo al lugar del crimen, recreándolo una y otra vez, hasta que mi cuerpo se arruga con el paso del tiempo y el agua se estanca en la bañera.




"Te miraba con cariño" yo te miraba como una sirena que mira a un pescador por primera vez, con admiración y con un deseo inmenso de poder amar a esa criatura con la había soñado mientras observaba el mundo que la rodeaba. 


Ahora hay bañeras en las calles y amantes en las camas. Este mundo apesta. 

lunes, 14 de julio de 2014

"La vida es un sueño, el despertar es lo que nos mata."


"Querido:
Estoy segura de que me estoy volviendo loca otra vez. Creo que no puedo pasar por otra de esas espantosas temporadas. Esta vez no voy a recuperarme. Empiezo a oír voces y no puedo concentrarme. Así que estoy haciendo lo que me parece mejor. Me has dado la mayor felicidad posible. Has sido en todos los aspectos todo lo que se puede ser. No creo que dos personas puedan haber sido más felices hasta que esta terrible enfermedad apareció. No puedo luchar más. Sé que estoy destrozando tu vida, que sin mí podrías trabajar. Y sé que lo harás. Verás que ni siquiera puedo escribir esto adecuadamente. No puedo leer. Lo que quiero decir es que te debo toda la felicidad de mi vida. Has sido totalmente paciente conmigo e increíblemente bueno. Quiero decirte que… Todo el mundo lo sabe. Si alguien pudiera haberme salvado, habrías sido tú. No me queda nada excepto la certeza de tu bondad. No puedo seguir destrozando tu vida por más tiempo. No creo que dos personas pudieran haber sido más felices de lo que lo hemos sido nosotros."



Sumergiendo su cuerpo en el río con los bolsillos llenos de piedras para impedir poder salir a flote. Así acabó con su vida la escritora Virginia Woolf el 28 de marzo de 1941.

"Y te seguiría al puto infierno si con eso consiguiera renacer."

Bienvenidos al club de la lucha, la reunión de todas esas almas perdidas, sedientas de emoción en sus tristes vidas. Me llamo Pandora y en este club sólo hay una regla: golpear primero, pensar después.


Y golpeas hasta que tus nudillos sangran, sin conseguir derribar los muros que te rodean, sin conseguir nada, sólo hacerte daño.

Sales a la calle tras perder la pelea, tambaleándote, dejando un rastro de sangre que emana de tus muñecas... "maldito seas, tú y tu estúpida manía de ganarme en todo".

Porque esta batalla se juega en casa, y vas perdiendo.