martes, 29 de noviembre de 2016

"Segunda clase: historia para amantes de las aves"

"Hay un tipo de pájaro cantor que cree morirse cada vez que se pone el sol. En la mañana, cuando sale el sol, se sorprende de seguir viviendo. 
Entonces canta una bella canción...
Yo he cantado cada mañana desde que te conocí."
 Y sigo cantándote al oído cuando no me escuchas...


Esas son las frases que tendríamos que decir cuando estamos tan cerca que nos respiramos, y sin embargo oigo mil historias entre réplicas y súplicas. Que si no tienes nada mejor que decir que el silencio, no lo rompas, no me rompas. 





Oh darling is my "sweet child o´mine"... 

Por favor, deja de decir mi nombre seguido de un "solo amigos", que a veces quiero besos franceses y crepes para desayunar(te). 
Cómo decirte que me gustas desde el momento en que lié nuestro primer cigarro, desde el primer momento que nos liamos.
Que te dibujo desde entonces y no sólo en sueños. 

No soy el tipo de nadie, soy otra especie de ave, otra especie de persona, otra especie. 

domingo, 20 de noviembre de 2016

"Deja el pasado en el pasado. "

Deja de juzgarme por como soy, o por lo que llevo puesto, deja de admirarme porque sea diferente y  deja de señalarme como un monstruo de circo, deja y déjame. Déjalo ya.

Que estoy a años luz de ti, de tu mentalidad de emborracharte hasta morir y resucitar al tercer día, de salir para ligar, para completarte por un momento con alguien... aunque vuestras fichas no encajen.

Que me siento mayor rodeada de gente de mi edad y me siento sola aunque no haya ni un solo segundo de silencio. Que necesito respirar para aguantar las ganas de mandarte a casa a leer, a cultivar tu mente y no usar el huerto sólo como lugar para llevarte a las tías.

Necesito espacio entre el mundo y yo para no explotar, porque cada vez es más difícil encontrar a alguien con el que un café vaya acompañado de un conversación tan placentera como la música, bajita, y al oído.


Necesito perderme para encontrarme, porque ahora sé donde estoy pero no donde debería estar.



No tengo un hogar al que quiera volver, sólo uno al que no quiero regresar.

Y te grito en silencio que lo dejes, que me dejes. Déjalo ya.